Don't stop believing.

martes, 10 de septiembre de 2013

Imagina Niall Horan Cap.30



                                    DOS VIDAS, UN DESTINO

                                        -Capítulo 30-


 -Me alegro de que me lo hayas contado Marta.- dijo Harry con una de sus sonrisas mortíferas.
Marta se limitó a sonreir, por una parte se sentía algo más libre, el saber que no había ya ningún secreto entre él y ella, pero por otra parte se sentía mal ya que había recordado un capítulo de su vida que no le hubiese gustado volver a hablar de el jamás, eso la entristecía. Con ayuda Marta consiguió olvidar aquello y hoy lo ha tenido que volver a sacar a la luz.
Harry notó el cambio de ánimo de Marta, la veía más apagada, quería hacer cualquier cosa por volver a verle sonreir pero no sabía el qué.
-Marta, te había preparado algo pero igual mejor lo dejamos para otro día.- dijo Harry.
-Está bien, quizá es mejor aplazarlo para otro día.- dijo Marta tímidamente.
-¿Quieres que volvamos a casa o nos quedamos aquí?.- preguntó él.
-¿Nos quedamos un rato?
-Vale.- Harry le dio la mano a Marta y se tumbaron en la orilla.

*****

-¿Quieres que vayamos a dejar las bolsas al coche?.- preguntó Niall mirando todas las bolsas que habías traído.
-De acuerdo.- Entre los dos cogisteis las bolsas y fuisteis hasta el coche de Niall.
Una vez haya metisteis todas las bolsas en el maletero y pusisteis rumbo a casa de nuevo. Ya no había tensión entre los dos, el mal rato de la cafetería ya quedaba muy lejos de vuestros pensamientos.
Niall puso la radio, sonaba Can't Hold Us.
-Me encanta esta canción.- dijiste mientras tarareabas el estribillo.
-Nose si te acordarás.
-¿De qué?
-Cuando te vi por primera vez esta canción estaba sonando.- dijo Niall sonriendo.
-¿Enserio?.- dijiste sin acordarte.
-Sí, bueno... más o menos.
-¿A qué te refieres?
-Un chico la estaba escuchando con el movil y cuando pasé a su lado para volver a la habitación, despues de que tu te hubieses marchado, miré la pantalla y eso, estaba escuchando esta canción.
Tú soltaste una carcajada.
-Am, así que ¿esta sería como nuestra canción?
-Supongo, no es muy romántica pero oye, una canción es una canción.- dijo Niall girándose para mirarte mientras reía.
Su coche era un descapotable, no muy nuevo, pero era muy bonito, de color negro y con un punto misterioso.
El viento te daba en la cara, te refrescaba y echaba tu melena hacia atrás.
Había pasado algo más de la mitad del trayecto, cuando de repente se paró el coche.
-¿Qué pasa?.- dijiste tú mirando a Niall.
Este miró el depósito de gasolina.
-Mierda, nos hemos quedado sin gasolina.- dijo él dándole un golpe al volante.
Tú te reías por la incómoda situación, eras de esas que cuando pasaba una cosa parecida a esta, te reías.
-¿Y ahora qué?.- dijiste riendo.
Niall reía contigo.
-Pues nose...- Se rascó la parte de detras del cabello, pensando.- Habrá que empujar supongo.
-Yo no pienso empujar.- dijiste tú.
-¿Sabes conducir?.- dijo él.
No, no sabías conducir, tenías 17 años, pero él todavía no había caído en la cuenta de eso, de que eres menor de edad para conducir, pero para nada querías empujar así que...
-Sí, si que sé.- dijiste saliendo del coche para ocupar el sitio de Niall.
-Ah, estupendo, yo empujo y tu ve cambiando de marchas y mantén puesto el embrague.
No entendiste nada de lo que Niall te había dicho.
Te sentaste en su sitio y Niall se puso en la parte trasera del coche.
-¡Vale Andrea, pon la segunda marcha!
-Emmm... ¿Y eso está en...? 
-¡Al lado del freno de mano!
Tú no lo veías, así que manipulaste una palanca, pero cuando la ibas a girar..
-¡No Andrea a eso nooo!.- gritó Niall.
Tú tiraste la palanca hacia adelante y se oyó un ruido en la parte de atrás.
-¿Por?.- dijiste.- Yo creeo que ha funcionado, ¿no?
-Eh, yo creeo que no.- te giraste para mirar a Niall.
-¡Lo sientooo!.- dijiste al verle lleno de barro.
No pudiste evitar soltar una carcajada.
-Me he puesto perdido...- dijo él mirándose de arriba a abajo.
Tú saliste del coche y fuiste hasta donde estaba él.
-Cuanto lo siento...- dijiste mirándole, pero no podías evitar reirte.
-Pero, ¿no sabías conducir?
-Esto... Pues.- no te dio tiempo a terminar.
-Espera, pero si tienes 17, como vas a conducir...
-Claro... Eso he pensado yo.
Niall rió.
-Esque no quería empujar, llevo las vans nuevas y como que no...- Dijiste, el chico soltó una carcajada.- Además no tengo fuerza.
-Andrea, ¿de verdad crees que te hubiese dejado sola empujando el coche?
Le miraste a los ojos.
-Jamás dejaría que hicieses eso, eres mi chica y el trabajo sucio lo hago yo.- dijo él abrazándote.
Tú le abrazaste y él te dio un besito en la frente.
-Te quiero.- dijiste.
Cuando os separastéis te diste cuenta de que estabas llena de barro.
-Em... Andrea.- dijo Niall mirándote.
-¿Qué pasa?.- dijiste tú.
Miraste tu ropa.
-Sigues estando guapa, que conste.
-Te mato.- dijiste riendo.
-Eh, que por lo menos las vans siguen limpias.
-Más te vale.- dijiste tú.
Los dos reisteis.
-Bueno, ¿y qué hacemos si no sabes conducir?
-Pues nose... Si quieres empujo.
-No quiero que te manches.
-Pero si ya me he manchado al darte el abrazo.- dijiste riendo.
-Ais, es verdad.
-Venga, ponte a conducir que yo empujo.- dijiste dandole una palmadita en el trasero.
Él rió y se puso a conducir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario